Peliculas de culto: Strictly Ballroom.
Voy a inaugurar una sección que espero se convierta en habitual. Cuestión lógica, por otro lado, apasionandome el cine como me apasiona.
Eso no significa que yo tenga buen gusto. (Creo que me repito un poco con lo de tener mal gusto. Consideradlo instinto de protección o complejo de inferioridad, como gusteis)
Me encantaría poder hablar maravillas de Orson Welles, Ingmar Bergman, Carl Theodor Dreyer o Andrei Tarkovski.
Aunque fuera de Woody Allen.
Quedas divinamente cuando divagas largo y tendido acerca de los grandes clásicos del cine mundial, (sobre todo si sabes de lo que hablas)
Pero, en fin, que va a ser que no.
En cambio, si empiezas a considerar a esas pelis que te gustan y que sabes que quizá no sean todo lo buenas que debieran
PELICULAS DE CULTO, las dignificas.
Quizá no quedas tan divinamente, pero ¿quién necesita quedar bien? Solo quien tiene complejo de inferioridad...
¡ouch! ¡MIERDA!

Bien. Empezaré con Strictly Ballroom o como se llamó aquí, El Amor Está En El Aire. Bonito, ¿verdad?
Es la primera película de Baz Luhrmann, autor tambien de Romeo + Juliet y Moulin Rouge!.
Un director especial. Con solamente tres peliculas ha conseguido un auténtico sello personal que le hace único.
Bueno, único y excesivo y recargado y hueco y ostentoso... le caben muchos calificativos y no todos halagadores.
Supongo que no es para todos los gustos, puede pecar de empalagoso, considerando que el tema principal de sus pelis es el AMOR, así, con mayúsculas, que triunfa sobre todas las cosas, que todo lo puede y tal.
Quizá a mí me gusta precisamente por eso, por lo exagerado y excéntrico del planteamiento y lo sencillo que acaba siendo el mensaje. A fin de cuentas, ¿que es la vida sin un poco de magia?
La película transcurre en el mundillo de los bailes de salón, en Australia que eso es un apunte importante. Son curiosos los australianos. Unos personajes muy curiosos.

El prota, Scott, se prepara desde niño en la academia de baile de su madre para convertirse en campeon del concurso más importante del pais y parece que está a punto de conseguirlo. Pero él no acaba de estar satisfecho porque no puede desarrollar toda su creatividad bajo las rígidas normas que rigen estos concursos de baile.
Por ello su pareja le abandona en el momento más delicado y tiene que buscar una nueva.
Fran, una de las alumnas más torpes de la academia se ofrece a ser su pareja bailando a su manera. Él la rechaza por no considerarla a su altura, pero ella le convence diciendole que para consegir lo que quiere tendrá que arriesgarse y , en un correcto castellano, que vivir con miedo es como vivir a medias.
Una vez acepta, llega el trozo Dirty Dancing, los ensayos, empezar a conocerse, a gustarse, lo típico. Y la escena más bonita, la del baile en el tejado, (escena recurrente en las pelis de este hombre)



Momentos antes de bailar juntos por primera vez, la madre de Scott le dice a todo el mundo que le ha encontrado pareja, por lo que Fran, desilusionada, se va corriendo. Él la sigue, la dice que no le importa lo que diga su madre y decide acompañarla a su casa.
Y aquí es donde llega la verdadera GENIALIDAD de la peli.

Fran es hija de españoles.
Y, por supuesto, solo hay dos tipos de españoles.
Toreros o cantaores y/o bailaores de flamenco. O mejor aún, las dos cosas a la vez. Eso sí que molaría mazo.
Observese al padre de la chica, moreno, bajito y cabreao, verdadero prototipo de español de pura cepa.

Bueno, que me pierdo, la familia de Fran le enseña lo que es bailar con el corazón, con el alma y con musho musho arte, porque otra cosa no, pero arte, a puñaos.
Pero cuando todo parece ser maravilloso, llega el golpe bajo. Le cuentan a Scott la triste historia de sus padres, de como parecía que tenían todo a favor para ser los mayores campeones de la historia y como todo se vino abajo porque su padre decidió bailar con sus propios pasos y como hundió su futuro por ello.
Ante semejante revelación, decide no arriesgarse y dar plantón a Fran.
Muy dramático y muy triste todo.

Y llega la gran final, antes de comenzar intenta disculparse con Fran, pero ella no le hace caso. Inmerso en un mar de dudas se cruza con su padre, (que durante toda la peli parece que acaba de sufrir una lobotomía) le cuenta la verdad, que su madre fué la que no quiso bailar con él por cobardía y que no cometa el mismo error.
¿Y que es lo único que puede suceder?

Por supuesto, que en un final apoteósico bailan juntos ante el aplauso de todos.
Y todo es maravilloso y son felices por siempre jamás bailando cha-cha-chas y pasodobles.

Es una historia predecible a más no poder, pero la cuenta de una manera taaaaan delirante y peculiar que no puedes evitar encontrarla simpática.
A mí me parece una gozada, es de esas pelis que te hacen sentirte alegre y feliz.
Ahora, la injusticia.
No está editada en DVD en España. Solo la puedo ver en una cinta de video grabada del Plus. Y el video está muriendo, le queda muy poco de estar con nosotros.
¡¡Y es que tampoco la encuentro en internet!! Al menos en español, solo en inglés.
Y lo que es peor aún
¡¡¡¡TAMPOCO ENCUENTRO SUBTÍTULOS!!!!
Solo en inglés y en polaco, que dime tú a mí que hago con subtítulos en polaco...
Así que...
¡¡STRICTLY BALLROOM EN DVD YA!!
Cohone...
Etiquetas: Movies, Películas De Culto